FRANCISCO GODIA
Francisco "Paco" Godia-Sales
Francisco nació el 21 de marzo de 1921 en Barcelona (España). Francisco fue el arquetipo de catalán de posición acomodada de la posguerra española que pilotó para Maserati como cliente de pago en los años cincuenta.
Francisco acabó cuarto en 1956 en los Grandes Premios alemán e italiano con su 250F. Francisco en 1951 fue el primer piloto español que participó en un Gran Premio de Fórmula 1, fue en el de España en el circuito barcelonés de Pedralbes, su coche era un Maserati 4CLT/48 4, inscrito por Scuderia Milano, que portaba el número 44 y acabó en décima posición, tras partir desde la decimoséptima plaza de la parrilla de salida. Durante muchos años Francisco fue el piloto español que más puntos había marcado, seis.
Corrió siempre con Maserati, como piloto privado y como oficial. Tomo la salida entre los años 1951 y 1958, en trece ocasiones. Se clasificó en ocho y obtuvo seis puntos. Su último Gran Premio lo disputó en el Circuit de Reims-Gueux en 1958 a los mandos de un Maserati 250F. Desde muy pequeño ya mostró su pasión par los automóviles, su debut en las carreras se produjo en Montjuich en 1945 al volante de un Hotchkiss.
En 1946 fue segundo en su segunda carrera con un Fiat Topolino y ganó en la tercera con un Delahaye 135. Francisco llegó a conducir cualquier automóvil, y después de utilizar un Pegaso con doble compresor y casi 400 caballos se le podía ver pilotar con su estilo generoso pero preciso un modesto Seat 1.400 de 45 caballos, o un Maserati 250F, o un Renault Dauphine de serie.
En 1948 disputó sus primeras pruebas a nivel internacional, acudiendo a diversos Grandes Premios, como el Grand Prix de l'Albigeois (sexto), Grand Prix de Italia, Grand Prix du Salon y Grand Prix de Penya Rhin con un Maserati 4CL de la Scuderia Auto Spagnola.
En los años que siguieron al final de la guerra no había apenas coches disponibles y tuvo que participar con Maserati en condiciones de inferioridad. En 1949 se presentó en las 24 Horas de Le Mans con un Delage y finalizó en un meritorio cuarto puesto.
En 1951, en la Peña Ring, acabó décimo con un viejo Maserati.
En 1954, con un modelo más competitivo, un Maserati 250F de la Officine Alfieri Maserati, obtuvo su primer punto gracias al sexto puesto alcanzado en el trazado de Pedralbes.
En 1955 participó como privado, pero para el Gran Premio de Lisboa, prueba no puntuable, lo hizo con un Ferrari, fue tercero y se adjudicó la vuelta rápida. Este resultado le sirvió para que Maserati le diese un trato semioficial.
1956 fue su mejor temporada, tras ser séptimo en Reims, terminó cuarto en Alemania e Italia y se clasificó sexto en el mundial.
En 1957, aun con un Maserati 250F de la Officine Alfieri Maserati, acudió a Nürburgring (fallo en la dirección), Pescara (fallo del motor) y Monza (noveno)
En 1958, después de diversas participaciones en el Mundial de Marcas, se retiró de las pruebas internacionales. Su mejor resultado fue un octavo puesto en Buenos Aires con un Maserati 250F privado.