El germano Michael Schumacher piloto de la Scuderia Ferrari con su Ferrari F310 - Ferrari 046 V10 fue el vencedor del LXVIIº Gran Premio d'Italia, un soleado 8 de septiembre de 1996 en el Autodromo Nazionale di Monza, circuito permanente de Milán (53 vueltas x 5,77 kms = 305,81 kilómetros), tras partir desde la tercera plaza de la parrilla de salida, a la estela de los Williams FW18 - Renault de Damon Hill y Jacques Villeneuve.

Esta fue la 22ª victoria de Michael y la 108ª de la Scuderia Ferrari.

Michael con su Ferrari fue también el autor de la vuelta rápidaal realizar un tiempo de 1 minuto 26 segundos 11 centésimas, en el 50º giro, a un promedio de 241,23 kmh,cuando marchaba solidamente en la primera posición.

Decimonovena pole position de Damon Hill, 95ª pole de la escudería británica Williams como constructor y 120ª de Renault como motorista, al haber rodado en  1 minuto 24 segundos 20 centésimas, a un promedio de 246,69 kmh.

Pero el piloto británico en la quinta vuelta sufrió un accidente que puso fin a su carrera en el trazado de Monza. 

Mientras, su compañero Jacques Villeneuve tras una errática progresión sólo pudo ser octavo, tras partir tras Damon, en la segunda plaza de la parrilla.

Un año antes, tras hacerse oficial su traspaso a la Scuderia, Michael Schumacher fue recibido muy fríamente en Monza por los tifosi italianos que, imbuidos por una sensación de  germanofobia, lo veían como a un simple mercenario, totalmente ajeno al "espíritu de la casa rossa"

Un año más tarde, el campeón alemán era acogido como un héroe por esos mismos tifosi respaldado por su reciente victoria en Spa Francorchamps, ahora se le veía como el salvador de la Scuderia.

“Lo que viviste en Hockenheim no es nada en comparación con el frenesí italiano. Te han adoptado como uno de los suyos”, le advirtió Jean Todt.

Michael no se ve decepcionado. Banderolas, carteles, pancartas, camisetas, ... es su jornada de gloria, y toda esta decoración se encuentra repartida por las gradas y a cada aparición en la pista de “Il Barone Rosso” este es calurosamente aplaudido.

Eddie Irvine, por su parte, no es olvidado: el turbio irlandés recibe su cuota de elogios. "Eddie juega un papel importante en el desarrollo de Michael", subraya Henry Peter, abogado de Ferrari. “Es el compañero de equipo ideal. Trabaja bien, no es un exhibicionista, nunca se queja. » Lo que lleva a su renovación para 1997.

En la cuarta posición finalizó el británico Martin Brundle piloto de la escudería B&H Total Jordan Peugeot con su Jordan 196 - Peugeot V10, que el sábado había calificado en la novena plaza de la parrilla de salida.

David Coulthard con su McLaren - Mercedes, Damon Hill con su Williams - Renault, Heinz-Harald Frentzen con su Sauber - Ford Cosworth, Eddie Irvine con su Ferrari y  Ricardo Rosset con su Footwork - Hart sufrieron accidentes en el transcurso de la prueba.

Pódium:

1. Michael Schumacher con su Ferrari (1h 17m 43,63s, a un promedio de 236,06 kmh).
2. Jean Alesi con su Benetton - Renault (a 18,27s).
3. Mika Hakkinen con su McLaren - Mercedes  (a 1m 6,64s).