LXXXVIIIº Gran Premio d'Italia
Gran Premio Heineken D'italia 2017
El piloto británico Lewis Carl Davidson Hamilton de la escudería Mercedes AMG Petronas Motorsport a los mandos de un Mercedes F1 W08 - Mercedes M08 EQ Power+ V6 turbo híbrido fue el agónico vencedor del LXXXVIIIº Gran Premio d'Italia, un soleado domingo 3 de septiembre de 2017 en el trazado del Autodromo Nazionale di Monza (53 vueltas x 5,79 kms = 306,72 kilómetros) en las proximidades de Milán.
Lewis partió desde la primera plaza de la parrilla de salida, escoltado por el Williams FW40 - Mercedes del piloto canadiense Lance Stroll.
Esta fue la 69ª pole position para Lewis Hamilton, la 83ª pole de Mercedes como constructor y la 166ª de Mercedes como motorista, al haber rodado en 1' 35,55'', a un promedio de 218,25 kmh.
Dicha pole trajo consigo finalmente la 59ª victoria de Lewis, y la 72ª de la escudería Mercedes.
A Lewis en esta ocasión sólo se escapó la vuelta rápida que fue a parar a manos del inspirado piloto australiano Daniel Ricciardo que con su Red Bull RB13 - TAG Heuer, realizaba un registro de 1'23''361, en el 49º giro, a un promedio de 250,18 kmh, cuando marchaba tras el Ferrari de Sebastian Vettel, con la esperanza de subir al tercer escalón del pódium.
Pódium:
- Lewis Hamilton con su Mercedes (1h 15m 32,31s, a un promedio de 243,63 kmh).
- Valtteri Bottas con el otro Mercedes (a 4,471s).
- Sebastian Vettel con su Ferrari (a 36,32s).
Hamilton logra una pole position épica bajo la lluvia y supera a Schumacher. Le siguieron Max Verstappen y Daniel Ricciardo, pero no podrá salir en esas posiciones por las penalizaciones pendientes de este fin de semana.
El gran beneficiado fue un sorprendente Lance Strolle, que con su Williams y en unas condiciones extremadamente complicadas, ocupó la segunda posición de la parrilla, compartiendo línea con Lewis Hamilton.
El gran decepcionado de la jornada fue Sebastian Vettel, que sólo pudo obtener el octavo mejor tiempo.
Lewis, en territorio enemigo, en esta ocasión se dio un paseo militar por el asfalto del Autódromo Nacional de Monza, secundado por su compañero, el finlandés Valtteri Bottas, obteniendo un doblete en plata que revierte el orden de clasificación del Mundial. Ante más de noventa mil 'tifosi', que no deseaban ver lo que allí aconteció este fin de semana. Sebastian Vettel cada vez se encuentra más cerca de convertirse en la réplica del Fernando Alonso de la era en que militaba en la escudería de Maranello, y aunque remontó desde la sexta posición cada vez se le aparece más en sus pesadillas el fantasma del asturiano.
Lewis se situó líder del campeonato por sólo tres puntos (238 por los 235 del germano), aunque es sabedor de que vendrán todavía trazados propicios para los de Ferrari, como el próximo de Singapur. Esta victoria tiene un valor simbólico, ya que la Scuderia Ferrari no vence en Monza desde que Fernando Alonso lo hiciera en 2010.
Fernando Alonso partió con una estrategia inversa, al igual que el belga Stoffel Vandoorne, que con 25 posiciones de sanción partió justo por delante de Fernando, en la decimoctava plaza de la parrilla. Ambos remontaron, y mucho, llegando a acariciar los puntos, sobre todo Stoffel, pero el propulsor nipón Honda no estaba una vez más por la labor.
El belga tuvo que abandonar a diecinueve giros del final sin potencia en su propulsor, que era nuevo recién cambiado por la mañana, mientras que el español tuvo problemas con su caja de cambios y fue frenado en seco por el Renault del inoportuno Jolyon Palmer, que le adelantó de forma irregular, saltándose una chicane y sin que el director de carrera le sancionar adecuadamente y en tiempo.
Carlos Sainz, finalizó decimotercero, con su penoso Toro Rosso en Monza no pudiendo remontar, al igual que su compañero el piloto ruso Daniil Kvyat, que arrancó desde la octava plaza de la parrilla de salida, que tampoco alcanzó el 'top ten'.