IIIº Gran Premio dell'Emilia-Romagna

Domingo: El holandés Max Emilian Verstappen piloto de la escudería austriaca Oracle Red Bull Racing a los mandos de un Red Bull RB18 - Red Bull RBPTH001 V6 turbo híbrido fue el vencedor del IIIº Gran Premio dell'Emilia-Romagna, la un nublado y a ratos lluvioso domingo 24 de abril de 2022 en el trazado del Autodromo Internazionale Enzo e Dino Ferrari, circuito permanente de Imola (633 vueltas x 4,909 kms = 309,049 kilómetros), tras partir desde la primera plaza de la parrilla de salida, precediendo al Ferrari de Charles Lecrec y a su compañero Sergio Pérez.

Pódium:

1. Max Verstappen con su Red Bull RB18 (1 hora 31 minutos 41 segundos 890 milésimas)
2. Sergio Pérez con su Red Bull RB18 a 16,527 segundos.
3. Lando Norris con su McLaren MCL36 - Mercedes a 34.834s

SABADO: En una vibrante carreara al sprint Max Verstappen venció a Charles Leclerc en la penúltima vuelta, mientras que el mexicano Sergio Pérez con un gran ritmo durante la prueba finalizaba en el tercer puesto.

El arranque de la carrera tuvo altibajos para Red Bull. Mientras Checo remontaba posiciones en una excelente salida, Leclerc aprovechaba el frío inicio de Verstappen para situarse líder.

Con un gran ritmo el de Ferrari se pudo mantener durante gran parte de la carrera en cabeza.

Mientras Carlos Sainz recuperaba posiciones y se consolidaba tras las posiciones de pódium.

Checo Pérez protagonizaba un par de bellos adelantamientos, superando a Kevin Magnussen y a Lando Norris, y en la vuelta 11ª ya estaba tercero y con el ritmo necesario para hacerse con la vuelta más rápida del día.

Verstappen sufrió durante gran parte de la prueba y parecía que Leclerc tenía todo resuelto para hacer estallar de júbilo a los suyos.

No obstante, en la vuelta vigésima, Max alcanzó a recuperar su posición en la parrilla de salida.

La carrera al sprint también vio como un coche de seguridad salía a la pista en los compases iníciales tras un incidente entre Zhou Guanyu y Latifi que dejó fuera al piloto chino llevó al Alfa Romeo a estrellarse contra una de las vallas en la primera vuelta. 

Esta primera prueba al sprint de la temporada no fue favorable para Alonso y su Alpine, que sufrió con la degradación de los neumáticos tras una salida manifiestamente mejorable.

Fernando que partía quinto  tenía como principal objetivo disputar la tercera y cuarta posición con el McLaren de Lando Norris y el Haas de Kevin Magnussen, pero lamentablemente el resultado final fue mucho más decepcionante, ya que las cosas se torcieron desde la misma salida, en la que el Alpine mostraba problemas con la parte eléctrica del motor. Alonso ha perdido rápidamente la posición con Daniel Ricciardo y Sergio Pérez, bajando a la séptima posición y siendo presionado posteriormente por Carlos Sainz y Valtteri Bottas.

VIERNES: Esta fue la decimocuarta pole position de Max Emilian Verstappen, la 74ª pole de la escudería austriaca Red Bull como constructor y la primera de la firma austriaca Red Bull como proveedor de unidades de potencia, al haber rodado en 1 minuto 27 segundos 999 milésimas, a un promedio de 200,825 kmh, 779 milésimas mas veloz que el Ferrari F1-75 de Charles Lecrec.

Otro borrón en el currículum de Carlos Sainz, mientras que la pole se la adjudicaba un piloto ajeno a la Scuderia, Verstappen seguido de Leclerc en un viernes pasado por agua y caótico.

Tras su accidente Carlos, en la Q2, partirá décimo el sábado en la carrera al sprint: "Un error un poco extraño, ya que no iba al límite ni tiraba a tope".

Magnífico quinto de Alonso con su Alpine.

La prometedora quinta plaza en la parrilla de salida de Fernando Alonso era muy positiva, ya  que la lluvia hace aflorar las carencias del Alpine A522 y esta, en principio no debería afectar al desarrollo de la prueba al esprint del sábado y la carrera del domingo.

La clasificación de Imola, esta vez en viernes y ante un fin de semana que casi computa el doble, al haber 34 puntos a repartir entre el sprint y la carrera, hubo un cambió del rojo ilusión de Ferrari a un rojo siniestro para Carlos Sainz tras perder el control de su F1-75 en la Q2, en la Rivazza. De forma inesperada se le fue el tren trasero cuando era segundo cómodamente en el registro de tiempos, y sin apurar mejorando ligeramente sus tiempos, cuando colisionó contra las protecciones a un ritmo suficiente para quebrar la suspensión delantera.